
Gráfico: https://www.gate.com/trade/ETH_USDT
A comienzos de diciembre de 2025, Ethereum destacó entre las principales criptomonedas y se posicionó como líder del mercado. Tres factores clave han impulsado el fuerte repunte de ETH: nuevas entradas de capital institucional, acumulación estratégica de direcciones ballena en niveles bajos y una mejora en las expectativas macroeconómicas.
Actualmente, Ethereum ha recuperado el rango de 3 320–3 330 $ y superó puntualmente la resistencia de 3 400 $. Diversos analistas institucionales consideran esta zona como un área estructural crítica, que condiciona tanto la dirección a corto plazo como el potencial de nuevas subidas.
Desde el punto de vista técnico:
Si ETH se mantiene por encima de este rango, los alcistas a corto plazo conservan el control.
Si ETH falla repetidamente en superar estos niveles, podría producirse una corrección.
Si ETH se mantiene por encima de 3 400 $, podría atraer a más traders seguidores de tendencia y capital cuantitativo.
Mientras ETH consolida por encima de 3 300 $, un aumento de la presión vendedora o una pérdida de impulso en zonas altas podría provocar un nuevo test a los soportes inferiores.
A simple vista, Ethereum ha cerrado varias veces por encima de 3 300 $ y ha tocado puntualmente los 3 400 $, lo que refleja mayor interés comprador. Sin embargo, estar “por encima” no implica necesariamente “estabilidad”.
La estructura actual del mercado de ETH presenta varios rasgos:
La actividad alcista se concentra en periodos concretos, sin señales claras de continuidad de tendencia.
Parte del capital a corto plazo ha realizado beneficios en niveles altos, lo que limita la fuerza de ruptura de ETH.
Si las expectativas macroeconómicas cambian, ETH podría corregir rápidamente.
En conclusión, los 3 300 $ actúan hoy como un “apoyo provisional”. Que se consolide como suelo real dependerá del volumen y los flujos de capital en los próximos días.
Las opiniones sobre si el rally de fin de año ya se ha materializado por completo siguen divididas. El consenso es que hay potencial, pero la certeza es limitada.
El fin de año suele ser un periodo de reasignación de fondos. Si ETH mantiene niveles clave, podría atraer más capital a medio y largo plazo.
Si el mercado sigue anticipando una relajación monetaria, los activos de gran capitalización como ETH se beneficiarán directamente.
La actividad de desarrolladores, los volúmenes en DEX y las entradas en pools de stablecoins muestran signos de recuperación.
Esto puede generar presión bajista a corto plazo.
Si los próximos datos son débiles o la política se vuelve más prudente, el mercado reevaluará el riesgo.
El rebalanceo de carteras, liquidaciones y coberturas aumentan, haciendo que los precios altos sean más susceptibles a oscilaciones.
En resumen: el rally de fin de año es un escenario a vigilar, pero no está asegurado. La continuidad de la subida de ETH dependerá de los flujos de capital y la orientación de la política macroeconómica.
Para gestionar la incertidumbre de fin de año, los inversores pueden desarrollar estrategias en los siguientes ámbitos:
Observar si ETH mantiene la estabilidad en el rango de 3 300–3 400 $. Una ruptura y consolidación por encima de 3 400 $ abriría la puerta a nuevas subidas; una caída por debajo de 3 250 $ exige cautela ante una posible corrección profunda.
Dada la volatilidad de las criptomonedas, evitar el “all-in”. Utilizar entradas escalonadas y establecer stop-loss razonables para mitigar caídas potenciales.
Ejemplos clave:
La convergencia de varias señales incrementa la probabilidad de éxito.





