Dogecoin lleva un tiempo comportándose de forma extraña.

Tras varias semanas lateralizando, la semana pasada subió de repente un 6,5% y el precio volvió a los 0,136 dólares. El incremento por sí solo no es gran cosa, pero tanto los datos on-chain como el gráfico de velas están mostrando algunas señales: podría estar gestándose algo importante.

**Primero, un descubrimiento curioso**: algunos traders han revisado el comportamiento de DOGE desde 2014 hasta ahora y han encontrado un patrón extraño. Las dos rondas anteriores del ciclo son casi idénticas: lateralización prolongada → ruptura progresiva → subida explosiva repentina. En la segunda ronda el precio llegó directamente hasta los 0,7 dólares. ¿Y ahora? El gráfico está dibujando la tercera vez.

Si realmente se repite este guion, 1 dólar no es un sueño, e incluso podría alcanzar los 1,5-1,7 dólares. Por supuesto, el "si" aquí es clave.

**El análisis técnico es aún más claro**. En el gráfico semanal ya se ha formado un patrón de taza con asa estándar; en el trading tradicional suele tener una alta tasa de éxito y normalmente significa que se avecina una ruptura tras mucho tiempo de consolidación. El cuerpo de la taza es el largo periodo en el fondo, el asa es este reciente ajuste con menor volumen.

**Hay dos cifras clave a vigilar**:
- 0,08 dólares es la línea de vida: si la pierde, prácticamente se acaba
- 0,20 dólares es el punto de explosión: si lo supera, puede comenzar la subida principal

DOGE ahora está atascado en medio, con las Bandas de Bollinger estrechándose y el RSI plano. Este tipo de situación suele anticipar o bien un gran movimiento, o bien un agotamiento total.

Otro detalle importante: las instituciones están empezando a moverse. Según se comenta, Grayscale ha incluido por primera vez DOGE en su pool de productos. Aunque el volumen aún es pequeño, lo relevante es la señal: el capital tradicional empieza a tomarse en serio esta "moneda de broma".

Las próximas semanas podrían ser muy importantes.