La negociación de nuevas listas ha sido brutal últimamente. ¿Los últimos días? Un auténtico infierno.

Ves algo con potencial, te lanzas a intentar coger la ola, y boom – resulta que hay una asignación masiva de tokens del 40% allí, lista para venderse en cada orden de compra. La acción del precio se ahoga antes incluso de empezar.

Y no me hagas hablar de los redeploys de esta semana. Ves un proyecto "nuevo" aparecer, y en minutos ya lo sabes. Todo el mundo lo sabe. Mismo esquema, diferente envoltorio. Así que, por supuesto, te mantienes alejado.

Da la sensación de que estamos atrapados en este ciclo donde las oportunidades genuinas se ahogan entre esquemas reciclados y lanzamientos manipulados. Te hace cuestionar si realmente vale la pena apostar por algo nuevo en este momento.