Michael Saylor recientemente reveló una señal bastante interesante: la actitud de los grandes bancos tradicionales de Estados Unidos hacia las criptomonedas ha dado un giro de 180 grados. Ahora, ya hay 8 bancos de primer nivel que están comenzando con servicios de custodia y préstamos de Bitcoin, algo que antes parecía impensable.

Lo más importante es que la tendencia regulatoria realmente está cambiando. Incluso Vanguard, que siempre ha sido conservador, ha dado un paso adelante permitiendo el comercio de productos ETF vinculados a Bitcoin y XRP. El mercado sigue apostando a que la Reserva Federal reducirá las tasas en 0.25 puntos, lo cual es una buena noticia para los activos de riesgo en este entorno macroeconómico.

La evolución de los precios también ayuda a ilustrar la situación: Bitcoin ha rebotado desde el mínimo de 86,700 dólares hasta aproximadamente 92,300 dólares, y ahora está apuntando a superar los 94,200 dólares. Pero, hablando claro, para los inversores minoristas, entrar en grandes cantidades todavía es complicado — los obstáculos como el marco legal, los requisitos operativos y el control de riesgos siguen allí. Parece que, a corto plazo, la brecha entre los actores institucionales y el mercado minorista todavía no podrá cerrarse.