El miércoles, el dólar estadounidense sufrió un revés, con esta operación provocando una caída del 0.4% en el índice del dólar, su peor caída en un solo día en tres meses — la última vez que estuvo tan mal fue a mediados de septiembre. ¿La causa? Después de que la Reserva Federal anunciara una bajada de tasas de 25 puntos básicos, las declaraciones de Powell hicieron que el mercado olfateara algo diferente.

En el lado de los bancos estadounidenses, el estratega Alex Cohen captó una señal clave: «Cuando Powell habló sobre el mercado laboral, claramente ya no fue tan optimista como antes.» Lo que resulta aún más intrigante es que esta vez, el presidente de la Reserva Federal centró su atención en los riesgos laborales, dejando el tema de la inflación de lado de manera superficial. Este cambio de actitud provocó una oleada de ventas del dólar.

El estratega macroeconómico Edward Harrison ofreció una interpretación más profunda: la situación actual es un poco delicada — el ritmo de la Reserva Federal de ser dovish cada vez está menos sincronizado con otros bancos centrales, y aquellos que aún están ajustando sus políticas parecen más hawkish. En este escenario de división, la debilidad del dólar probablemente seguirá dependiendo de cómo evolucione el mercado de bonos y la diferencia de tasas. Para el mercado de criptomonedas, un dólar débil suele significar una ventana de mejora en la liquidez.