Últimamente muchos amigos preguntan: ¿Otra subida de tipos en Japón, podría desencadenar una crisis en los mercados financieros? ¿Cómo protegerse?

No te alarmes todavía. La subida de tipos en Japón hace tiempo que dejó de ser una novedad. Desde marzo del año pasado hasta ahora, esta ya es la cuarta vez. Es como cocinar una rana en agua tibia, la temperatura se va subiendo lentamente, no es que de repente hierva.

¿Y por qué suben los tipos? La lógica es sencilla: las cosas cada vez son más caras, y el dinero cada vez vale menos. Los precios han subido durante cincuenta meses seguidos, incluso un bol de ramen en la calle ha aumentado de precio. El tipo de cambio del yen también ha ido bajando, provocando un aumento en los costes de las materias primas importadas. El objetivo de subir los tipos es enfriar la inflación y, de paso, estabilizar el tipo de cambio.

¿Y qué impacto tiene en nosotros, los inversores comunes? La clave está en si haces "arbitraje de yenes". En pocas palabras, es tomar prestados yenes a bajo interés para ganar diferencia en otros mercados.

Incluso ahora, aunque suben los tipos, la tasa del yen sigue siendo baja, la ventana para hacer arbitraje todavía está abierta, y los fondos no se retirarán de repente. Además, esto ya lleva más de un año en marcha, el mercado lo ha anticipado, no hay pánico.

¿A dónde irán esos fondos? Principalmente a Estados Unidos, Corea y Europa. Para nuestro mercado, el impacto directo es limitado.

Lo que realmente hay que vigilar es tu propia estructura de holdings. Si siempre estás persiguiendo tendencias o haciendo trading a corto plazo, cualquier noticia puede hacerte entrar en pánico. Pero si tienes inversiones en activos de valor a largo plazo y tu estrategia está clara, estas oscilaciones son solo ondas en un lago.

En definitiva, el mayor riesgo nunca ha sido la noticia externa, sino tú mismo, no haberte pensado bien y lanzarte sin más.

No te dejes llevar por las noticias. Entiende la lógica subyacente y haz lo que tengas que hacer.