El Banco de Japón está a punto de implementar una decisión de aumento de tasas en diciembre 19, y esta vez tiene cierto peso—el primer aumento en 30 años, con una magnitud de 25 puntos base, elevando la tasa de referencia al 0.75%. Puede parecer un evento menor, pero su impacto en el mercado de criptomonedas no debe subestimarse.

En los últimos años, los bajos intereses del yen han sido un "paraíso de arbitraje" en los mercados de capitales. Muchos inversores han tomado préstamos en yenes baratos para especular con Bitcoin, altcoins e incluso acciones. En este modelo, siempre que el mercado suba, apalancarse en yenes es rentable. Pero en cuanto los intereses suben, esa "ventaja gratuita" se cierra.

¿Qué pasará después de que se implemente el aumento de tasas? Probablemente esto: las instituciones y ballenas que tienen posiciones de préstamo en yenes se verán obligadas a cerrar sus posiciones, el arbitraje se desmoronará y los fondos, como si vieran un obstáculo, se apresurarán a regresar a Japón. Bitcoin y otros activos de riesgo serán objetos de ventas rápidas.

La situación actual es como estar en la víspera de una tormenta. Si el gobernador del Banco de Japón, Ueda Shinji, envía señales hawkish, sugiriendo que continuará subiendo las tasas, el mercado podría experimentar una fuerte corrección. ¿Podrá Bitcoin mantener los 80,000 dólares? ¿Se debilitarán colectivamente las altcoins? La respuesta a estas preguntas podría conocerse el 19 de diciembre.

Por supuesto, si el banco central adopta una postura más moderada y emite expectativas dovish, la reacción del mercado podría ser más estable. Pero el riesgo real que enfrentamos ahora es que se active un ciclo de aumento de tasas en yenes, lo que provocará una reevaluación de la liquidez global y aumentará la volatilidad en el mercado de criptomonedas.

Se recomienda a todos mantenerse alertas. Protejan sus holdings en spot y prepárense con suficiente efectivo para emergencias. Estos días, seguir el mercado será agotador, así que prepárense mentalmente.