Agrupación de Altcoins y Problemas Fundamentales de Web3 en la Actualidad

El mercado de criptomonedas actual puede dividir los proyectos altcoin en tres grupos bastante claros, y si miramos directamente a su esencia, entenderemos por qué la mayoría de los inversores minoristas siguen perdiendo dinero. Grupo Primero: Proyectos de Alta Calidad Estos son proyectos fundamentales, que se centran principalmente en la blockchain nativa y la infraestructura básica. A través de muchos ciclos de mercado, mantienen su valor y suelen crecer bien cada vez que vuelve el flujo de capital. Nombres como ETH, LINK o XRP pertenecen a este grupo. Su característica común es tener aplicaciones prácticas, una comunidad grande y un papel indispensable en el ecosistema. Grupo Segundo: Proyectos Pura Estafa Este grupo solo existe en papel con un whitepaper elegante. Cuando se listan en un exchange, generalmente también es el pico del precio. Después de que el equipo venda todos los tokens, el proyecto casi desaparece. Los inversores que compran al final casi con certeza serán los que asuman las consecuencias. Grupo Tercero: Proyectos “Desviados” – También el Grupo Más Grande Este es el mayor problema de Web3 en la actualidad. Estos proyectos no necesariamente son estafas, algunos tienen productos en funcionamiento, pero los objetivos entre el proyecto y los inversores no coinciden en absoluto. Los inversores ven el token como un activo de inversión, esperando que aumente de valor. Mientras tanto, el proyecto considera a los compradores de tokens como usuarios que pagan para generar datos bonitos. El token no tiene mecanismos para reducir la oferta, ni incentivos para aumentar su valor a largo plazo. El proyecto espera a los usuarios, los usuarios esperan que el “precio suba” por parte del proyecto, y al final ambos se decepcionan. Desde la perspectiva del proyecto, esperar que el flujo de inversión minorista en crypto pueda sostener un producto grande es algo poco realista. Crear un producto a medias, emocionarse con sus propios esfuerzos, pero sin generar un valor económico real. Para los inversores, ignorar las plataformas de infraestructura y comprar en este tipo de proyectos es una pérdida casi inevitable. ¿Hacia Dónde Va el Futuro de Web3? Si Web3 solo se basa en proyectos débiles y en un flujo de capital “no inteligente” actual, el futuro será muy difícil. La verdadera esperanza está en otro lugar: cuando el capital y el talento de alta calidad de Web2 participen, combinándose con IA para crear modelos de negocio más eficientes y realistas. En un contexto donde Internet tradicional enfrenta muchas dificultades, que las empresas y talentos busquen nuevas direcciones a través de Web3 es algo completamente posible. Entonces, solo así podrá formarse un ciclo de crecimiento inteligente y sostenible. En resumen, Web3 no carece de potencial, pero para que realmente explote, necesita a las personas correctas, el dinero correcto y la forma correcta de hacerlo.