Pi Network se enfrenta a una crisis de confianza tras una demanda por fraude de 10 millones de dólares. El demandante, Harro Moen, acusa al proyecto de un plan de fraude a gran escala, lo que ha provocado una caída del 5% en el precio del token PI. La demanda revela tres grandes problemas: la transferencia no autorizada de 5.137 tokens PI en abril de 2024, la venta secreta de más de 2.000 millones de tokens y el retraso deliberado en la migración de la red que ha causado pérdidas a los usuarios.
Demanda de 10 millones de dólares revela tres acusaciones mortales
(Fuente: X)
Según los documentos judiciales, el demandante Harro Moen afirma que el plan de fraude de Pi Network ha durado varios años y ha causado importantes pérdidas económicas, solicitando una compensación de 10 millones de dólares. El núcleo de la demanda se centra en tres acusaciones mortales, cada una de las cuales pone en entredicho la integridad operativa de Pi Network.
La primera acusación es la transferencia no autorizada de tokens. Moen afirma que el 10 de abril de 2024, los 5.137 tokens PI de su monedero verificado fueron transferidos sin autorización a una dirección desconocida. Este incidente no es un caso aislado; Moen considera que forma parte de una conspiración sistemática para vender más de 2.000 millones de fondos de usuarios de PI. Si esta acusación es cierta, significaría que la arquitectura de seguridad de Pi Network presenta fallos fundamentales y que los activos de los usuarios pueden ser malversados en cualquier momento.
La segunda acusación se refiere al retraso deliberado de la migración a la mainnet. Moen añade que, debido a que Pi Network no migró sus 1.403 tokens restantes a la red principal, sufrió grandes pérdidas no realizadas. El proceso de migración a la mainnet de Pi Network comenzó en 2021 y, tras más de tres años, muchos usuarios siguen teniendo sus tokens bloqueados en la testnet, imposibilitando su comercio. Este retraso prolongado ha sido cuestionado como una maniobra deliberada del equipo para controlar el ritmo de liberación de tokens y beneficiarse de ello.
La tercera acusación es la más demoledora: control centralizado. La demanda señala que, aunque Pi Network se promociona como una red descentralizada, los demandados supuestamente mantienen el control centralizado operando solo tres nodos validadores. Esto contrasta fuertemente con la afirmación del proyecto de tener decenas de millones de usuarios. Si los nodos validadores están altamente centralizados en manos del equipo, Pi Network es en realidad un sistema centralizado en el que el equipo puede modificar reglas, controlar transacciones e incluso congelar activos de usuarios de forma unilateral.
Triple golpe de la demanda contra Pi Network
Colapso de la confianza: Las acusaciones de transferencias no autorizadas y ventas secretas destruyen la confianza de los usuarios en la seguridad de la plataforma
Riesgo regulatorio: Las acusaciones de fraude pueden desencadenar investigaciones por parte de la SEC estadounidense y otros organismos reguladores
Fuga de desarrolladores: La polémica sobre el control centralizado puede llevar a los desarrolladores a abandonar el desarrollo de aplicaciones en Pi Network
Desbloqueo diario de 6,1 millones de tokens agrava la presión vendedora
(Fuente: PiScan)
Estas acusaciones pueden intensificar el mayor problema de Pi Network: la adopción por parte de los usuarios. El proyecto ya carece de casos de uso efectivos que puedan sostener un crecimiento a largo plazo, y ahora los desarrolladores podrían incluso abandonar completamente la red. Pi Network siempre ha destacado su enorme base de usuarios (afirma tener más de 50 millones), pero la actividad real en la cadena y las aplicaciones útiles son extremadamente limitadas.
Un problema aún más grave es la presión continua por el desbloqueo de tokens. Según los datos de PiScan, los tokens PI se siguen desbloqueando a un ritmo medio de 6,1 millones diarios. Este aumento constante de la oferta, si la demanda no crece, ejercerá inevitablemente una presión deflacionaria sobre el precio. Bajo la sombra de la demanda, los nuevos compradores serán más cautos y los poseedores pueden acelerar su salida, desequilibrando aún más la oferta y la demanda.
La escasez de liquidez podría agravarse aún más, y el trading especulativo a corto plazo acentuará la presión deflacionaria. Actualmente, el comercio de PI se concentra principalmente en unos pocos exchanges pequeños; las plataformas principales como Binance y Coinbase aún no han listado el token. Esta liquidez limitada hace que el precio sea muy vulnerable a grandes ventas; si la demanda desencadena ventas de pánico, la liquidez actual podría no ser suficiente para absorberlas.
Según el calendario de desbloqueo de 30 días, en el próximo mes entrarán en circulación unos 183 millones de tokens PI, lo que supone un aumento significativo respecto al suministro circulante actual. Si la demanda sigue aumentando, los nuevos poseedores desbloqueados podrían optar por vender inmediatamente para evitar riesgos, lo que provocaría una caída en espiral.
Análisis técnico: el soporte de 0,37 dólares es la última línea de defensa
(Fuente: Trading View)
En medio de la controversia, el precio del token PI está probando un soporte fuerte, que coincide con el límite inferior de un triángulo ascendente de dos meses y el nivel de retroceso de Fibonacci 0,5. Esta coincidencia técnica convierte la zona de 0,37 dólares en un área clave de disputa entre alcistas y bajistas. El triángulo ascendente suele considerarse una figura de continuación alcista, pero las noticias sobre la demanda podrían cambiar radicalmente las expectativas técnicas.
Los indicadores de momentum muestran los primeros signos de sentimiento alcista. El índice de fuerza relativa (RSI) ha rebotado desde niveles cercanos a sobreventa, lo que suele ser señal de un suelo en la corrección. El indicador MACD también se acerca gradualmente a un cruce dorado por encima de la línea de señal, lo que indica fortaleza. Desde el punto de vista técnico, estas señales apoyan la posibilidad de un rebote a corto plazo.
En el escenario optimista, si el soporte de 0,37 dólares se mantiene, el precio podría impulsarse hacia el objetivo de 0,40 dólares, un aumento del 8% respecto al nivel actual. Esto requeriría que el mercado considere la demanda como un caso aislado y no un problema sistémico, y que el ritmo de desbloqueo de tokens se ralentice o surjan noticias positivas que contrarresten el impacto negativo.
Sin embargo, la demanda podría afectar gravemente al sentimiento del mercado y frenar el lento ritmo de crecimiento. En un escenario pesimista, si la demanda sigue creciendo o aparecen más víctimas, el precio de PI podría romper el soporte de 0,37 dólares y dirigirse hacia el mínimo histórico de 0,15 dólares, una caída del 30%. Este nivel ya se alcanzó en las primeras fases del proyecto, y si se vuelve a tocar, marcaría el colapso total de la confianza en Pi Network.
El escenario más extremo sería una caída hasta el nivel de retroceso de Fibonacci 1,618 en 0,075 dólares, lo que supondría una bajada del 65% respecto al precio actual. Por debajo de esta zona apenas hay soportes históricos para amortiguar el riesgo, lo que crearía un vacío peligroso. Si esto sucede, Pi Network podría acercarse a la desaparición y convertirse en otro proyecto fallido de criptomonedas.
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RideTheWindAndWaves
· hace7h
La ignorancia es audaz, cualquier basura se atreve.
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区块链天才老四
· hace8h
El ecosistema necesita colaboración. La colaboración no se basa en palabras, sino en dinero contante y sonante; si el equipo del proyecto no tiene fondos para preparar el terreno, el π que tenemos en nuestras manos es solo un número.
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SeniorBrotherKe
· hace8h
En realidad, ahora todos están hablando en favor del equipo del proyecto, ¡pero el equipo del proyecto no está a la altura!
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YMW2500
· hace8h
¡De la nada, pura tontería!
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ScrapsFromTheCryptocurrency
· hace8h
Para difamar, realmente se han esforzado mucho.
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SFExpress
· hace9h
De todos modos, ahora el equipo del proyecto está presionando pero no supera la k, no hace el mapeo, va planteando los problemas uno por uno a los pioneros, y el precio de venta es bajo.
¡Pi Network enfrenta una demanda por fraude de 10 millones de dólares! 2.000 millones de tokens vendidos podrían llevar su valor a cero
Pi Network se enfrenta a una crisis de confianza tras una demanda por fraude de 10 millones de dólares. El demandante, Harro Moen, acusa al proyecto de un plan de fraude a gran escala, lo que ha provocado una caída del 5% en el precio del token PI. La demanda revela tres grandes problemas: la transferencia no autorizada de 5.137 tokens PI en abril de 2024, la venta secreta de más de 2.000 millones de tokens y el retraso deliberado en la migración de la red que ha causado pérdidas a los usuarios.
Demanda de 10 millones de dólares revela tres acusaciones mortales
(Fuente: X)
Según los documentos judiciales, el demandante Harro Moen afirma que el plan de fraude de Pi Network ha durado varios años y ha causado importantes pérdidas económicas, solicitando una compensación de 10 millones de dólares. El núcleo de la demanda se centra en tres acusaciones mortales, cada una de las cuales pone en entredicho la integridad operativa de Pi Network.
La primera acusación es la transferencia no autorizada de tokens. Moen afirma que el 10 de abril de 2024, los 5.137 tokens PI de su monedero verificado fueron transferidos sin autorización a una dirección desconocida. Este incidente no es un caso aislado; Moen considera que forma parte de una conspiración sistemática para vender más de 2.000 millones de fondos de usuarios de PI. Si esta acusación es cierta, significaría que la arquitectura de seguridad de Pi Network presenta fallos fundamentales y que los activos de los usuarios pueden ser malversados en cualquier momento.
La segunda acusación se refiere al retraso deliberado de la migración a la mainnet. Moen añade que, debido a que Pi Network no migró sus 1.403 tokens restantes a la red principal, sufrió grandes pérdidas no realizadas. El proceso de migración a la mainnet de Pi Network comenzó en 2021 y, tras más de tres años, muchos usuarios siguen teniendo sus tokens bloqueados en la testnet, imposibilitando su comercio. Este retraso prolongado ha sido cuestionado como una maniobra deliberada del equipo para controlar el ritmo de liberación de tokens y beneficiarse de ello.
La tercera acusación es la más demoledora: control centralizado. La demanda señala que, aunque Pi Network se promociona como una red descentralizada, los demandados supuestamente mantienen el control centralizado operando solo tres nodos validadores. Esto contrasta fuertemente con la afirmación del proyecto de tener decenas de millones de usuarios. Si los nodos validadores están altamente centralizados en manos del equipo, Pi Network es en realidad un sistema centralizado en el que el equipo puede modificar reglas, controlar transacciones e incluso congelar activos de usuarios de forma unilateral.
Triple golpe de la demanda contra Pi Network
Colapso de la confianza: Las acusaciones de transferencias no autorizadas y ventas secretas destruyen la confianza de los usuarios en la seguridad de la plataforma
Riesgo regulatorio: Las acusaciones de fraude pueden desencadenar investigaciones por parte de la SEC estadounidense y otros organismos reguladores
Fuga de desarrolladores: La polémica sobre el control centralizado puede llevar a los desarrolladores a abandonar el desarrollo de aplicaciones en Pi Network
Desbloqueo diario de 6,1 millones de tokens agrava la presión vendedora
(Fuente: PiScan)
Estas acusaciones pueden intensificar el mayor problema de Pi Network: la adopción por parte de los usuarios. El proyecto ya carece de casos de uso efectivos que puedan sostener un crecimiento a largo plazo, y ahora los desarrolladores podrían incluso abandonar completamente la red. Pi Network siempre ha destacado su enorme base de usuarios (afirma tener más de 50 millones), pero la actividad real en la cadena y las aplicaciones útiles son extremadamente limitadas.
Un problema aún más grave es la presión continua por el desbloqueo de tokens. Según los datos de PiScan, los tokens PI se siguen desbloqueando a un ritmo medio de 6,1 millones diarios. Este aumento constante de la oferta, si la demanda no crece, ejercerá inevitablemente una presión deflacionaria sobre el precio. Bajo la sombra de la demanda, los nuevos compradores serán más cautos y los poseedores pueden acelerar su salida, desequilibrando aún más la oferta y la demanda.
La escasez de liquidez podría agravarse aún más, y el trading especulativo a corto plazo acentuará la presión deflacionaria. Actualmente, el comercio de PI se concentra principalmente en unos pocos exchanges pequeños; las plataformas principales como Binance y Coinbase aún no han listado el token. Esta liquidez limitada hace que el precio sea muy vulnerable a grandes ventas; si la demanda desencadena ventas de pánico, la liquidez actual podría no ser suficiente para absorberlas.
Según el calendario de desbloqueo de 30 días, en el próximo mes entrarán en circulación unos 183 millones de tokens PI, lo que supone un aumento significativo respecto al suministro circulante actual. Si la demanda sigue aumentando, los nuevos poseedores desbloqueados podrían optar por vender inmediatamente para evitar riesgos, lo que provocaría una caída en espiral.
Análisis técnico: el soporte de 0,37 dólares es la última línea de defensa
(Fuente: Trading View)
En medio de la controversia, el precio del token PI está probando un soporte fuerte, que coincide con el límite inferior de un triángulo ascendente de dos meses y el nivel de retroceso de Fibonacci 0,5. Esta coincidencia técnica convierte la zona de 0,37 dólares en un área clave de disputa entre alcistas y bajistas. El triángulo ascendente suele considerarse una figura de continuación alcista, pero las noticias sobre la demanda podrían cambiar radicalmente las expectativas técnicas.
Los indicadores de momentum muestran los primeros signos de sentimiento alcista. El índice de fuerza relativa (RSI) ha rebotado desde niveles cercanos a sobreventa, lo que suele ser señal de un suelo en la corrección. El indicador MACD también se acerca gradualmente a un cruce dorado por encima de la línea de señal, lo que indica fortaleza. Desde el punto de vista técnico, estas señales apoyan la posibilidad de un rebote a corto plazo.
En el escenario optimista, si el soporte de 0,37 dólares se mantiene, el precio podría impulsarse hacia el objetivo de 0,40 dólares, un aumento del 8% respecto al nivel actual. Esto requeriría que el mercado considere la demanda como un caso aislado y no un problema sistémico, y que el ritmo de desbloqueo de tokens se ralentice o surjan noticias positivas que contrarresten el impacto negativo.
Sin embargo, la demanda podría afectar gravemente al sentimiento del mercado y frenar el lento ritmo de crecimiento. En un escenario pesimista, si la demanda sigue creciendo o aparecen más víctimas, el precio de PI podría romper el soporte de 0,37 dólares y dirigirse hacia el mínimo histórico de 0,15 dólares, una caída del 30%. Este nivel ya se alcanzó en las primeras fases del proyecto, y si se vuelve a tocar, marcaría el colapso total de la confianza en Pi Network.
El escenario más extremo sería una caída hasta el nivel de retroceso de Fibonacci 1,618 en 0,075 dólares, lo que supondría una bajada del 65% respecto al precio actual. Por debajo de esta zona apenas hay soportes históricos para amortiguar el riesgo, lo que crearía un vacío peligroso. Si esto sucede, Pi Network podría acercarse a la desaparición y convertirse en otro proyecto fallido de criptomonedas.